“ MIEDO A LA PÉRDIDA DE DERECHOS” NI UN PASO ATRÁS

Hay un momento importante en la historia reciente en materia de Igualdad que marcó lo que iba a suponer una revolución legislativa: Las declaraciones de ANA ORANTES RUIZ en un programa de televisión el 4 de diciembre de 1997, denunciando los malos tratos recibidos por su esposo durante 40 años. “Me hizo el boca a boca y me siguió pegando”, “todos los días por cualquier cosa me ponía la cara así... porque yo era analfabeta, era un bulto, no servía para nada”, “cinco de mis ochos hijos fueron testigos de las continuas palizas”. Estas declaraciones sirvieron para que, dos semanas después, Ana fuera asesinada por su marido, José Parejo (condenado a 17 años), que la quemó en el patio de su casa en Cúllas-Vega (Granada) en presencia de su hija de 14 años.

Este terrorífico acontecimiento puso rostro y voz a la violencia de género, o mejor dicho, al terrorismo machista. A partir de entonces, se empezó a tomar conciencia del problema y lo que hasta el momento era un  “asunto de alcoba”, “un tema de la intimidad del matrimonio”. Donde nadie debía entrar, comenzó a ser un problema social, una lacra social donde sí había que entrar, sí había que opinar, controlar y legislar, para evitarlo.

Pero no fue sino hasta el Gobierno de Zapatero cuando se visibilizó el problema y se comenzó la andadura legislativa que hoy tenemos.

Ley Orgánica 1/2004, de 28 de diciembre, de medidas de protección integral contra la violencia de género.

Tan solo nueve meses después de entrar en el Gobierno Zapatero, el PSOE aprueba esta ley llamada en un principio de violencia doméstica, luego machista y hoy, nadie lo duda, terrorismo machista. ¿Cómo reaccionarían si el terrorismo en España hubiese matado a 57 personas en tan solo un año?.

El terrorismo machista se ha cobrado ya bastantes víctimas, 71 en el 2007, 84 en el 2008, 68 en el 2009, 85 en el 2010, 67 en el 2011, 57 en el 2012, y ya llevamos 10 en el 2013. Más de 600 en la última década.

EEUU con Obama se está planteando ahora la aprobación de una ley similar.

Ley 13/2005, de 30 de junio, de matrimonio entre personas del mismo sexo.

Esta ley modifica el artículo 44 del Código Civil y ha supuesto una auténtica revolución. Ha sido recurrida por el PP por entender que vulneraba el artículo 32 de nuestra Constitución. Afortunadamente, el Tribunal Constitucional la ha declarado constitucional. Ahora Inglaterra, Francia y EEUU la están planteando. 

Ley 15/2005, de 8 de julio, que modifica el Código Civil y la Ley de enjuiciamiento civil en materia de separación y divorcio.

Ley importante en materia de Igualdad porque supuso un avance para tramitar el divorcio y agilizar los trámites. Así, ya no será precisa la separación previa y el divorcio se podrá tramitar a los tres meses de celebrado el matrimonio.

Ley 39/2006, de 14 de diciembre, de promoción de la autonomía personal y atención a las personas en situación de dependencia.

Una ley que ha supuesto una gran ayuda no solo para las personas dependientes, sino también para tantas mujeres que son las encargadas del cuidado de estas personas. Esta ley ha dignificado el trabajo en parte de estas mujeres.

 Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo, para la igualdad efectiva de mujeres y hombres.

Para una mejor comprensión de esta ley hay que ver el artículo 14 de nuestra Constitución, que establece la no discriminación por razón de sexo, en relación con el artículo 9.2 de la misma norma, que establece la obligación de los poderes públicos de aprobar leyes que garanticen la igualdad efectiva. Así esta ley establece las bases para impedir las desigualdades en el ámbito laboral, reconoce el derecho a la conciliación de la vida personal, familiar y laboral y fomenta una mayor corresponsabilidad entre hombres y mujeres;  al igual que supuso un impulso para la igualdad salarial. Trata también de las cuotas de participación de las mujeres como forma de garantizarla y es una ley presupuestada.

Ley Orgánica 2/2010, de 3 de marzo, de salud sexual y reproductiva e interrupción voluntaria del embarazo.

Pendiente de recurso tramitado ante el Tribunal Constitucional por el PP. Marca la libertad de decidir de las mujeres y que está siendo cuestionada por la derecha.

La asignatura educación para la ciudadanía.

Materia sobre la que queda un profundo y largo trabajo para concienciar a los jóvenes en materia de género.

Otras medidas del Estado del Bienestar.  

Estamos a medio camino, pues aún queda mucho por hacer. Sin embargo, lo que pensábamos que no podía ocurrir está ocurriendo. Los últimos acontecimientos ponen de manifiesto cuanto decimos; casos como los de Ponferrada (no podemos permitir que se consiga un Gobierno con el apoyo de un acosador sexual); o las declaraciones de Toni Cantó, parlamentario que cuestiona los malos tratos; o que Cospedal cuestione la cuota que garantiza la participación de las mujeres.

Vivimos también unos momentos de crisis en el que las mujeres tenemos una doble carga, la provocada por esta crisis injusta y desmerecida para quienes la sufrimos y la mochila que cargamos todas por tener que asumir de nuevo lo que la crisis va dejando. Hoy estamos viviendo, además, un machismo peligroso en algunas familias en las que todos sus miembros están desempleados y se escucha con cierta asiduidad, “ahora no toca hablar de Igualdad”. Esta expresión encierra una malévola situación para las mujeres que no podemos ni debemos consentir.

Si a esto unimos los recortes que está llevando a cabo la derecha en materia de violencia de género, desmantelando la propia ley; la de tasa judicial que grava más a las mujeres que se ven impedida de acudir a la Justicia por falta de medios, poniendo en peligro la tutela judicial efectiva reconocida en nuestra Constitución o la Justicia gratuita;  la reforma laboral, duplicándose el numero de desempleadas desde que la reforma entró en vigor; la Ley de Dependencia, que dignificó el trabajo de tantas mujeres; los recortes en Educación y Sanidad; o la pretendida anulación del aborto. Podemos estar viviendo un retroceso de 30 años en materia de Igualdad.

El desmantelamiento del Estado del Bienestar es más que evidente y lo mismo está ocurriendo con las cuestiones de género. Es posible que nosotras hayamos vivido mejor que nuestras madres y nuestras abuelas, pero nuestras hijas vivirán, a este ritmo, peor que nosotras y eso no lo podemos permitir. La derecha quiere hacernos volver a “nuestras labores”, por eso hoy más que nunca debemos estar unidas y tomar conciencia, dejando aparte diferencias y fomentando encuentros para defender lo que tanto nos ha costado conseguir, es hora del trabajo en común.

Por eso, a través de la Secretaría General y de la Secretaría de Igualdad, os instamos para que entre todas podamos llevar a cabo todas aquellas iniciativas que sirvan para visibilizar lo que está ocurriendo e implicar al mayor número de mujeres posible de nuestra sociedad chiclanera. La Secretaría de Igualdad viene trabajando con colectivos vecinales de mujeres en orden a trasladar estos problemas y creemos que es obligación de todas y de todos colaborar en este trabajo.

NI UN PASO ATRÁS EN MATERIA DE IGUALDAD

Cándida Verdier Mayoral Secretaria General  PSOE /CHICLANA		Isabel Fuentes González Secretaria de Igualdad. PSOE/CHICLANA